Los cambios que tienen que permitir a los municipios de la demarcación lograr modelos de
Polígons d’Activitat Econòmica (PAE) competitivos han centrado la jornada hacia una visión estratégica de los PAE, dirigida al personal técnico de los entes locales. La sesión ha reunido perspectivas diversas, a través de dos ponencias y una mesa redonda, con el objetivo de poner sobre la mesa
debilidades que hoy entorpecen la competitividad y, a la vez, perfilar las vías hacia un modelo de industria de éxito por los territorios y por el conjunto del país.
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Pierre Laffite, presidente de la Fundación Sophia Antípolis, ha sido invitado a la sesión para compartir la experiencia del
primer parque tecnológico y científico europeo, situado en la Provence-Alpes-Côte de Azur. Actualmente, da trabajo a 35.000 personas de manera directa en el sector del alta tecnología y tiene un impacto positivo en otros sectores económicos. «Nuestra función principal es desarrollar un
ecosistema innovador, con el objetivo de mantener la competitividad internacional de Europa», ha sintetizado.
Tener visión de futuro y capacidad de adaptación continua, priorizar la
innovación y adoptar carácter internacional son claves de este proyecto, según ha explicado. «Contamos con innovadores en algunos de los
sectores productivos con
más valor añadido (TIC, energía, biociéncia), tenemos escuelas que ofrecen formación adaptada a estas nuevas profesiones y servicios como instalaciones deportivas y hoteles, además de disponer de un aeropuerto internacional muy cerca, y hemos creado una
red de innovadores bajo el principio de la innovación compartida», ha detallado.
Además de los méritos de la experiencia, Laffite ha destacado que la
política industrial está aconteciendo «crucial» y que en un entorno cambiante de manera vertiginosa las grandes empresas «
no son invencibles«. Al lado, otro riesgo del momento lo ha puesto de manifiesto el economista y consultor en políticas públicas Eduard Jiménez, quienes ha alertado durante su intervención del proceso de «
desapropiación» de los PAE, a raíz del contexto de crisis: «Ningún actor que interviene se los hace suyos y no se implican en la gestión», ha denunciado.
Para encarar estratégicamente el futuro de los PAE, Jiménez ha remarcado que el primer paso es
resolver el deficiente diagnóstico de las problemáticas. Una tarea que, atendiendo los patrones de concentración y especialización diferentes entre comarcas metropolitanas y de interior, tienen que llevar a
diferentes estrategias de los PAE, para responder a realidades particulares. «La actividad económica, aunque sea global,
no puede evitar estar en un lugar«, ha puesto de relevo.
Yendo algo más allá, ha planteado tres ejes de intervención para lograr un
modelo competitivo por el sector industrial: Reforma urbana de los tejidos en riesgo de obsolescencia, gestión eficiente de los activos y la localización y reconceptualitzación de los nuevos tejidos.
Las reflexiones expuestas durante las ponencias han sido complementadas con una mesa redonda para plantear visiones y
experiencias de especialización estratégica a los PAE, en la cual han participado voces que trabajan en torno los Polígonos de Actividad Económica desde los terrenos público y privado, como la gerente de proyectos de inversión de la agencia de la Generalitat ACCIÓ, Dolors Panigua, el presidente de la Unió de Polígono Industrials de Catalunya (UPIC) o el Presidente del
Catalonia Innovation Triangle (CiT), presentado en la jornada como caso local ejemplar.
www.diba.cat
Mesa participante en la sexta jornada sobre Polígonos de Actividad Económica